domingo, 6 de abril de 2008

Para facilitar el estudio: Tema 1

Al hablar con vosotros he visto que un guión de cada uno de los temas, con el que podáis repasar y organizar todo lo que ya hayáis estudiado, os vendría bien.
Tal y como decía en el post anterior, en el tema 1 todo lo que hay que saber está en los documentos de la web.
Esta presentación os puede ayudar. También os dejo aquí el link a la presentación .

Preguntad, en este mismo sitio, si algún punto no es claro o requiere una nueva explicación.

9 comentarios:

Fátima Malmierca dijo...

“El hombre por la inteligencia y la razón mueve su voluntad, y la voluntad ejercita la inteligencia y la razón, actúan así de forma simultanea en los procesos conscientes del hombre”

Para entender mejor esta relación sería preciso entender primero cada uno de los términos que utilizamos.

Definir exactamente en qué consiste la inteligencia es complejo, sin embargo, sabemos que el hombre la posee. La inteligencia del hombre es la capacidad para entender, asimilar, elaborar información y utilizarla para resolver problemas.

El hombre desarrolla su inteligencia desde que nace. En un primer momento ni conoce, ni entiende, pero a medida que este crece desarrolla estas capacidades (no es que desarrolle nuevas, si no que crecen las que ya tiene). Se desarrolla en base a una necesidad, vivir…
La inteligencia del hombre se caracteriza por ser racional, puesto que, somos capaces de discurrir el entendimiento, que nos permite ser conscientes de nuestra propia existencia.
Según el libro de Yepes, lo que diferencia el proceso estimulo-respuesta, propio de los animales, del hombre; es que éste, sintiendo el estimulo puede negarse a el. Introduce así dos factores en juego, la inteligencia (consciencia del estimulo)y voluntad (capacidad de afirmar o negar la repuesta al estimulo). Se nos explica, como el hombre al recibir un estimulo, responde, pero no como cualquier animal, si no que, hace uso de la razón, lo que lleva a tener “instintos conscientes”, que le llevan a hacerse dueño de sus actos, ("el hombre entiende que vive, y por ello aprende a vivir")… Sin embargo, la decisión de llevarlas o no acabo, es tarea de la voluntad.

El hombre, con inteligencia y razón, necesita de la voluntad... Ésta, activa el alma, mueve a hacer o no una cosa. Sin ella, no tendríamos el dominio de nuestros actos. Así, para ser libres, necesitamos como hemos visto de dos cosas, inteligencia(para conocer las alternativas) y voluntad (para poder escoger una de ellas).

Consuelo Martínez Priego dijo...

Bien, bien... es francamente interesante, aunque no sea objeto directo de nuestro estudio este a�o, el uso de dos t�rminos que para muchos son sin�nimos: inteligencia y raz�n. Uno significa, por sus antecedentes etimol�gicos, a "leer dentro"; el segundo est� relacionado con "ratio, raz�n, criterio, proporci�n". La raz�n distingue, analiza, relaciona... la inteligencia ve. En fin, este tema me gusta, pero no seguir�.
En cuanto a la articulaci�n entre inteligencia y voluntad, deduzco que permite entrever tanto la relevancia de la inteligencia, cuanto de la voluntad, si bien queda subrayada -creo- la funci�n de la voluntad, toda vez que la decisi�n es lo determinante en la vida libre del hombre.
Es decir, parece que la superaci�n de la vida instintiva -que no tenemos pero cuyas manifestaciones nos acechan- pende del crecimiento de la voluntad. Este punto s� ser� objeto detenido de estudio, tanto en la �ltima parte del tema 2 como en el estudio de la voluntad en el tema 3. En Yepes se dedica todo un
ep�grafe a la voluntad en el cap�tulo 6.
Sobre la cuesti�n de la raz�n y la intelgencia aparecen algunas definiciones en http://conpriego.com/2008/02/22/verdad-y-falsedad-veracidad-y-cinismo/

María PérezdeGuzmán dijo...

Soy María de 3º de Magisterio. Es la primera vez que entro en este blog y la verdad hay gente muy profesional y los comentarios que hacen ayudan mucho a la hora de resolver dudas.
Un tema que me inquieta mucho es el alma. El hombra es hombre, gracias a el alma(causa formal, causa eficiente, causa final) sin ella no seríamos hombres como tales, pero también hay que tener en cuenta que el hombre es cuerpo o material (causa material, causa formal)
El hombre también tiene una estructura psíquica formada por capacidades operativas (facultades que cada uno tenemos) que nos ayudan a realizar operaciones ejemplo: poder ver. Ahora bien, mi duda es que la persona va creciendo y también crece su personalidad ¿ la personalidad sería una facultad del hombre? Nosotros tenemos la facultad de tener personalidad????...

Consuelo Martínez Priego dijo...

Genial, María!! Das en el clavo en la descripción progresiva de la estructura psíquica del hombre y de la relación que ésta tiene con el análisis causal del ser vivo, en este caso, del hombre. Y, como mujer pensante, la operatividad en general a la que abre paso la consideración de las facultades, te conduce a "eso que llamamos personalidad". Ciertamente la personalidad tiene relación con el obrar. Lo veremos al finalizar el tema 2.

Intentaremos dar una definición de personalidad para acercarnos a lo que planteas:
LLAMAMOS PERSONALIDAD AL CONJUNTO DE RASGOS SUFICIENTEMENTE ESTABLES QUE CONDICIONAN EL OBRAR DEL HOMBRE.

Con esto creo que queda clara la relación entre personalidad y estructura psíquica. En efecto, la personalidad se define por los estilos concretos de obrar (afrontar, recibir, ser impactado, abordar una situación... hasta el modo de enfermar queda modulado por la personalidad). Simultáneamente, por hablarse de obrar, hacemos referencia a las facultades y a los órganos de las mismas, es decir, a la dimensión corporal del hombre. Y, efectivamente, la corporalidad es un elemento francamente relevante en la personalidad (ligado a eso que se denomina temperamento). Sin embargo, puesto que todo lo que el ser vivo hace repercute en el mismo individuo (inmanencia) y así el ser vivo crece, el obrar puede modular, modificar, los rasgos de personalidad pero no cambiarlos radicalmente, puesto que posee un soporte somático.

En resumen, que la personalidad no es una facultad, sino el conjunto de rasgos que posee el obrar de cada hombre; es decir, -dicho con toda la imprecisión del mundo- la personalidad quiere indicar cómo puede obrar un hombre en un contexto, pero lo dice como condición, no como determinación.

Anónimo dijo...

Soy Lourdes Gallardo de 1º Magisterio titulados, entiendo, que la persona
humana tiene que ser o estar «hecha» de un
modo peculiar y más noble que los animales
y las plantas para poder comportarse de la
manera destacada en que lo hace, eso se explica por la
presencia en los hombres de un alma
espiritual, que lleva consigo un modo de ser
radicalmente diverso del de las realidades
«inmersas por completo» y «plenamente
afectadas» por la materia

Unknown dijo...

He leído los comentarios y creo que llevo demasiado tiempo desenganchada del blog como para enterarme del todo, pero me ha parecido realmente interesante el comentario de María. Yo pienso que la personalidad no podria ser una facultad puesto que las facultades caracterizan al ser humano en cuanto a especie, no en cuanto a persona. Pienso que la personalidad está en un ámbito más profundo, está al siguiente nivel de las facultades, somos seres humanos porque tenemos ciertas facultades pero además somos cada persona por la personalidad que tenemos. Así, la personalidad tiene características de ser facultad. Estas son que se puede reforzar, puede "no tenerse muy pronunciadamente", y puede educarse o dejarla "que pase lo que Dios quiera". A pesar de lo dicho, espero que Consuelo me aclare estos conceptos.

cristina dijo...

Hola soy Mª Cristina de 1º de infantil. He estado leyendo los comentarios, y me parecen interesantes. Desde mi punto de vista, pienso que desde que nacemos, nuestra inteligencia se va formando, influye también, la genética de los padres, pero aunque no esta inteligencia, fuera muy baja, si nuestro padres, la van fomentando, y con la ayuda cuando esten con en la escuela, los profesores ayudan, toda esa inteligencia, se puede desarrollar. Puede ser cierto, que una niño salga superdotado, pero también puede, que un niño sea también muy inteligente, con su esfuerzo y la ayuda de sus padres y profesores. Pero hablando, de esto, pienso que muchas veces la inteligencia y que un niño tenga defícit en algo, o nazca con algún retraso, no significa, que no se de cuenta o que no sea inteligente, porque se dan casos, de personas que tienen un déficit, y se los toma por tontas y muchas veces no son tontos, porque desde mi punto de vista, se esta confundiendo esto, un poco.Ya que últimamente, y en mi caso, he oído " como este niño, esta mal, pues no sabe, lo que hace" y yo digo no perdona, ese niño sera tonto, pero también tiene, la suficiente inteligencia, para arreglarselas y hacer alguna faena gorda y causar muchos daños.

Consuelo Martínez Priego dijo...

Me preguntan de nuevo cómo empezar. He contestado en un correo a la persona interesada, pero creo que a algunos de vosotros, tal vez los que estáis algo "perdidos", puede ayudarles.
Pego el texto:

«Simplemente aborda con orden las cosas.
Paso 1: lee con detenimiento "la verdad y los estados subjetivos de la mente ante la verdad". No es para estudiarlo "completamente", pero sí para que te quede muy claro qué es verdad, duda, opinión, etc. Los conceptos básicos (las definiciones de cada epígrafe) (en 2 horas super-liquidado)
Paso 2: Coge todos los documentos del tema 1 y, uno tras otro, los vas estudiando. Una vez leídos y comprendidos, puedes ver unas trasparencias que resumen el contenido de todo eso. Están en el blog. (una hora por documento y otra media las trasparencias y queda liquidado también.
Paso 3: el capítulo 1 de Yepes. Cuando lo hayas terminado (2 horas), lees "materia y vida" (1 hora); después, estudias "Introducción al estudio del ser vivo" (y el siguiente documento sobre la estructura psíquica del hombre (3 horas).
Paso 4: capítulo 2 de Yepes (2 horas), resto de los documentos que aún no he colgado.
Con esto estás al día. Entre cosa y cosa, lee el blog. Verá que trata los temas que estás estudiando. Además puedes ir haciendo comentarios sobre lo que estudias y lees en el blog: así se profundiza un poco más»

Hasta aquí los consejos. Ahora, los hechos!! ;)

Consuelo Martínez Priego dijo...

Bonita la expresión de LOURDES GALLARDO ''las realidades «inmersas por completo» y «plenamente afectadas» por la materia''. Cierto, así es. La intensidad de SER que en el hombre no se agota configurando materia es muy superior a la del resto de los seres vivos. Es más, puede realizar operaciones en las que no intervienen órganos. En ellas la "dependencia" de la materia... ¿nula? Cuando estudiéis la inteligencia, las características del lenguaje humano y por tanto de la facultad que ha de existir si es que tenemos lenguaje... veréis que interesante.

En cuanto a la PERSONALIDAD, FÁTIMA da un paso interesante.
1. Reafirma que no es una facultad, puesto que eso es idéntico a todos los miembros de una especie, y la personalidad parece ser propia de cada uno.
2. Afirma por tanto que está más allá. Correcto. Ese más allá tiene que ver con el crecimiento, el ejercicio de las facultades que cada uno realiza, y el poso -inmanencia- que ese ejercicio deja. Es decir, cada uno tiene sus facultades y acaba teniendo la personalidad que -a partir de las disposiciones somáticas con las que nace- se hace así mismo.
3. En ese sentido es acertado señalar que la personalidad ha de educarse.
4. Introduce también la articulación especie (hombre) <-> personalidad <-> persona. Ahí se centra él paso del tema 2 al 3. Entiendo que la persona es algo más que el obrar, es decir, algo más que la personalidad.

Pero seguir por aquí es quitar emoción a la película. En el próximo capítulo (en el 3) veremos la solución.

Por último a Mª CRISTINA -y a todos- os recomiendo el vídeo colgado en la anotación "lo dado y lo adquirido". Creo que trata, de lleno, la cuestión de la educación y el desarrollo de las facultades superiores.